Nódulos de kéfir de leche: 5 tips para aprovecharlos
Los nódulos de kéfir de leche -o pajaritos- corresponden a una matriz con forma de coliflor o gránulo, que contiene a las distintas especies de bacterias y levaduras que conforman el cultivo. Si has cultivado yogur de pajaritos, sabrás que los nódulos de kéfir felices se multiplican muy rápido, por eso en esta nota te presentamos 5 formas novedosas de aprovecharlos.
1. Batido de frutas probiótico
En una licuadora, añade media taza de nódulos de kéfir (o los que tengas), una taza de kéfir de leche y otra taza de tus frutas favoritas. Decora con semillas o láminas de coco. Si quieres tener un snack siempre disponible en tu congelador puedes congelarlos en moldes y consumirlos como paleta de helado.
2. Nódulos de kéfir como reemplazo de huevo
Debido a su viscosidad, los nódulos de kéfir procesados sirven como un excelente sustituto del huevo en recetas, sobre en todo masas dulces como queques, donde conseguir una textura esponjosa y húmeda es fundamental.
Simplemente pon tus nódulos de kéfir en la licuadora o procesadora de alimentos y utilízalos para reemplazar el huevo. Ten en cuenta que 3 cucharadas soperas de pajaritos equivalen a 45 ml, aproximadamente el volumen de un huevo.
3. Aliño para ensalada
Gracias a su sabor ácido, los nódulos pueden servir para un delicioso aliño de ensalada. Pon en la licuadora: 1 cucharada de nódulos de kéfir, 3 cucharadas de kéfir de leche, ajo en polvo, sal y pimienta molida gruesa a gusto, procesa todo y ¡listo! Ideal para darle sabor a un mix de hojas verdes.
4. Paila de huevo + nódulos de kéfir
Por su textura, los nódulos de kéfir van muy bien revueltos en una paila de huevo. Esto te permitirá hacer tu desayuno un poco más liviano y darle un sabor nuevo al típico pan con huevo, que quedará súper con trocitos de pimentón o ciboulette.
5. Mascarilla cicatrizante
Como ya hemos mencionado antes en el blog, los nódulos de kéfir de leche tienen características que pueden ayudar a la cicatrización de heridas. Para aprovechar estas propiedades, sólo procesa los nódulos en una licuadora con aloe vera o miel para obtener un gel. Te será fácil obtener esta textura debido a la viscosidad de los pajaritos. Luego sólo debes aplicar sobre la herida por al menos una semana.
Otra opción es almacenarlos: tal vez pienses que nunca les vas a fallar a tus pajaritos, pero si quieres estar preparad@ para algún imprevisto puedes separar algunos nódulos, cubrirlos de leche y:
- Guardarlos entre 1 y 7 días en el refrigerador a 4°C
- Congelarlos por algunos meses a -20°C
Así puedes tener una reserva en caso de contaminación o desbalance en la composición bacteriana. Eso sí, ten en cuenta que se perderá un poco de la diversidad de cepas que lo componían originalmente. Se puede recuperar, pero mientras más tiempo pasen guardados, más demorará este proceso. ¡O también puedes simplemente regalárselos a otr@ fermentista! 🙂
Si esta nota te sirvió, te pueden interesar otras entradas sobre técnicas de fermentación:
Ebook La bioquímica básica detrás de la producción del kéfir de leche